Que llega un momento en que puedes ser “jefe” -poned más comillas si queréis; se entenderán dentro de poco- de muchas personas: alumnos en clase/tutorías, alumnos de proyecto fin de carrera, contratados de investigación (ahí lo de “jefe” es mucho más literal ;P), becarios de investigación, doctorandos en general, otros compañeros si eres investigador principal de un proyecto (ahí lo de “jefe” es todo un eufemismo, dejémoslo en coordinador ;P), y en la mayoría de las ocasiones tu trabajo como tal “jefe” consiste exclusivamente en hacer crecer a esas personas como personas y profesionales, y en el resto de casos en contribuir al bien de la sociedad, o al de la humanidad, con una pizca de conocimiento.
(No he incluido la aplicación de este curioso concepto de “jefe” al ámbito gestor universitario -cargos- porque ni lo conozco de primera mano ni me atrae más que un trozo de panceta a un ornitorrinco)
Nada más por estas experiencias que te llevas merece la pena tener un sueldo base mileurista y soportar lo de tener que corregir ejercicios de exámenes uno a uno 😀





