Que no, que no es eso

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Que cuando se dé simultáneamente que tengas publicados muchos artículos científicos (papers en el argot), que además tus coautores no tengan ni de lejos ese número de publicaciones -se entienden coautores distintos que no participen en todos-, y que ellos tengan dedicación a tiempo completo, durante todo el año, al desarrollo de ideas, pruebas y experimentos mientras que tú no -normalmente porque no te dejen tus demás obligaciones-, el hecho de que aparezcas como autor en tantos papers no te hará mejor investigador que todos ellos (las cursivas, como el resto del texto, son mías). De hecho, probablemente investigarás bastante menos y no podrá decirse que estéis en igualdad de condiciones en ese aspecto, sino todo lo contrario.

Será seguramente el caso de que estés dirigiendo grupos de investigación y será eso, dirigir y formar gente, lo que harás todo el tiempo. Y quizás proponer alguna idea, incluso brillante, pero totalmente falta de desarrollo. Del laboratorio, de manera suficientemente intensa como para llamar investigación a lo que haces, no estarás disfrutando.

Que sí, admitamos que son necesarios los directores de proyectos y de grupos de investigación, y que poder abstraerse de los detalles para guiar mejor la línea de investigación puede hacerte pensar más rápidamente (incluso puede avanzar la investigación más rápido, teniendo en cuenta el trabajo conjunto tuyo y de los que guías, que si sólo estuvieran ellos o sólo estuvieras tú), pero llamemos a cada cosa por su nombre. Guiar a la gente para que desarrolle ideas no es investigar: es dirigir y formar gente. Los empresarios, los entrenadores, los militares, etc., también lo hacen, incluso probablemente mejor que tú, y no se llaman a sí mismos peones, centrocampistas o soldados.

Por otra parte, tener muchos papers no te hará mejor investigador ni más destacable en ese ámbito que el que tenga menos (habría que ver su calidad y hasta dónde has contribuido con horas de verdadera investigación a los mismos); dirigir un gran número de proyectos no te hará mejor investigador que el que lleve menos (sólo te quitará más tiempo que a éste); dirigir proyectos con mucha gente a tu cargo no es ser un investigador más relevante que los que llevan menos gente (serás un director más relevante, probablemente); manejar grandes cantidades de dinero con ellos no es ser un investigador enorme y poderoso (un investigador poderoso debería ser un oxímoron, you know, al contrario que uno enorme, hecho este último fácilmente realizable con sólo estar sentado investigando todo el día); conocer a muchos otros investigadores personalmente y tener muchos contactos en tu área no te hará mejor investigador que quien no los tenga (sólo se podrá deducir algo de tu extroversión y simpatía); ser muy popular a causa de todo lo dicho, en fin, no es ser un investigador de primera (sólo se podría decir que has conseguido llamar mucho la atención; pobre de ti si te da por investigar en algún problema teórico, oscuro, y encima sin resultados patentables y/o visibles).

En fin. Éstas y algunas otras cosas al respecto me repito yo de vez en cuando, por si, confuso por la vorágine de ideas institucionales que tratan de meternos en la cabeza a presión -consignas, más bien; al grado de idea sólo llegan cuestiones que no se prestan a la propaganda-, se me olvidara lo que es la esencia de este trabajo en algún momento.

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