Se confirma definitivamente que soy de Andrómeda. Ya era conocido que me repelen la playa, la feria, las procesiones de Semana Santa a lo bestia, el flamenco, las sevillanas y los Morancos, o sea, que a mí los tópicos andaluces como que no. Pero si rascamos un poco más hondo para ver si en asuntos más serios me va la cosa andaluza, nos encontramos que todavía menos.
He aquí un maravilloso tarjetón que editaron para la Exposición Universal de Sevilla (Expo’92) las Hermandades de Donantes de Sangre de la Seguridad Social (asociaciones que prestan apoyo a los sistemas públicos de donación de sangre), y que yo he rescatado de la mudanza de la casa de mis suegros porque mi suegro no tira ná, que tó puede servir pa algo algún día ;P
No tiene desperdicio. Según este sesudo análisis de la sustancia andaluza, podemos concluir sin duda alguna que yo tengo de andaluz lo que de cura, o lo que de político, o lo que de periodista… o lo que de nacionalista, ya puestos.
Por delante:

Y por detrás (la mejor parte, y donde se confirma que el buen andaluz no tiene que preocuparse de acentuar las mayúsculas ni usar correctamente las comas):

Como no sé qué es la “realidad concreta de Andalucía” (en contraposición a la abstracta, supongo), tampoco sé lo que es un “buen español” (en contraposición al malo), no tengo noticias de qué aspiraciones legítimas tienen las provincias de mi región (y no parecen muy hermanas, la verdad), no protejo a mi región (que yo sepa) ni restrinjo mi consumo a productos andaluces, y tampoco leo periódicos andaluces diariamente sino un puñado de periódicos de cualquier origen, podríamos concluir que mi puntuación es de un mediocre 5. Pero es que a eso le tendríamos que añadir que los otros 5 puntos no tienen relación especial con Andalucía (ni geográfica ni culturalmente) y habrá del orden de miles de millones de personas en el globo terráqueo que las cumplan (espero).
En fin. Alguna esperanza de redención he de tener (¿quizás mi seseo?), pero no la encuentro por ningún cajón. Será que tampoco la busco mucho, ciertamente.





