Una buena película: guión decente (sin demasiados moralismos, aparte de un difuso antimaquinismo), actuaciones estupendas, mezcla adecuada y en proporciones justas de acción, intriga (manida, pero bien incluida), y humanismo…
Merece la pena verse, aunque no haya una trama original ni ningún efecto especial particularmente novedoso, y aunque quede la sensación de que debían haberse atrevido a hacerla más compleja explotando el meollo de la cuestión: la imposibilidad de distinguir humanos de máquinas. Posiblemente lleguemos a eso mucho antes de conseguir algo parecido a la inteligencia artificial…






